Publicado originalmente en: OFHSoupKitchen.org
Es esa época del año otra vez. Ha comenzado un nuevo año, pero aún así parece que no hemos logrado nada el año pasado. Y, sin embargo, de alguna manera tenemos que escribir un nuevo conjunto de objetivos para este año. Si no sabe qué objetivos espirituales debe establecer para 2020, aquí tiene algunos consejos.
¿Cuáles son las metas espirituales?
Cada uno de nosotros tiene diferentes tipos de metas para el nuevo año. Algunos quieren buena salud, mientras que otros quieren un avance profesional. Pero sea lo que sea, sólo hay un propósito: lograr algo. Ésta es principalmente la razón por la que tenemos objetivos: lograr el resultado que anhelamos. Y algo que la mayoría de los humanos casi siempre anhelan es la iluminación espiritual. En pocas palabras, las metas espirituales son los objetivos que nos fijamos para acercarnos a Dios. ¿Por qué necesitamos metas espirituales? Puede que tengamos diferentes creencias religiosas, pero si hay algo que nos une a todos es la sed de alimento espiritual. Si bien la mayoría de nosotros vamos a la iglesia, recitamos oraciones y participamos en diversos ritos espirituales, la mayoría de las veces esto no es suficiente para llenar ese vacío dentro de nosotros. Ese vacío que nos hace anhelar una conexión más profunda con nosotros mismos y nuestro creador. Para eso están las metas espirituales. Nos ayuda a crecer y madurar espiritualmente y a construir una mejor relación con Dios y nuestros semejantes.
Cómo establecer metas espirituales para 2020
Antes de comenzar a escribir lo que desea lograr espiritualmente para este año, aquí hay algunos recordatorios que debe tener en cuenta:
Solicite orientación
Establecer tus objetivos para todo un año puede resultar confuso. A veces, hay tantas cosas que quieres hacer que no sabes por dónde empezar. Si está estancado en una rutina, no tema pedir Su guía. Ore para que sea iluminado en cuanto a sus planes para usted. Todos nosotros estamos aquí con un propósito, incluido usted. Levanta todas tus dudas y aspiraciones y ora para que Él te guíe por el camino que Él ha preparado para ti.
Evalúe su año
Hay un dicho famoso que dice: no puedes cambiar el pasado pero puedes aprender de él. De hecho, las mayores lecciones que podemos aprender provienen de nuestras experiencias. Piensa en tus objetivos del año pasado. ¿Cuál de ellos has logrado? ¿Cuál de ellos resultó demasiado? ¿Dónde crees que te equivocaste? Hacerse estas preguntas puede ayudarle a formular un mejor plan para el próximo año.
Visualiza tus objetivos
Imagínese dentro de un año. ¿Cómo es tu vida espiritual? Crear una visión de tus objetivos te ayudará a dividirla en planes prácticos más pequeños. Imagina las cosas que quieres lograr. Si le ayuda, anótelo todo en papel. Luego crea un gráfico o un diagrama, lo que sea que pueda ayudarte a visualizar tus objetivos espirituales.
Se realista
Tener metas es bueno. Pero tener demasiadas metas puede resultar agotador. En la vida y en la fijación de objetivos, una cosa es siempre cierta: nunca muerdas más de lo que puedes masticar. En lugar de lograr tus objetivos, podrías terminar demasiado estresado y frustrado. Puede llevarlo a perder el impulso y darse por vencido incluso antes de alcanzar sus objetivos. Así que mantenlo real. Asegúrese de que sus objetivos sean posibles y alcanzables. Comience con lo básico. Evite apuntar a cosas que sabe que nunca podrá hacer.
No seas demasiado duro contigo mismo
Si no logras alcanzar una meta, no te desanimes. Más importante aún, no te castigues por las cosas que no pudiste hacer. (Relacionado: Las lecciones más valiosas que aprendimos el martes con Morrie ) Sigue intentándolo. Dios ve tus luchas y dolores. Él nunca te abandonará. Oren por fortaleza y fortaleza para seguir avanzando.
Ejemplo de metas espirituales
Aquí hay algunos ejemplos de metas espirituales que puedes establecer para 2020:
- Lea toda la biblia. Dedica unos minutos cada día a leer varios versículos de la Biblia. Con 365 días en un año, leer la Biblia completa es ciertamente factible.
- Participar activamente en los servicios religiosos . Asistir no es suficiente. Necesitas estar ahí física, mental y espiritualmente.
- Haga de la oración diaria un hábito. Bastará con una simple oración de unos minutos cada día. Puedes hacerlo todas las mañanas al despertar o antes de acostarte. Con el tiempo, se convertirá en un hábito.
- Mantenga un diario espiritual. Úselo para expresar sus pensamientos y reflexiones diarias. Es una lectura motivadora cuando te sientes deprimido.
- Practica el perdón. Perdonar a alguien que te ha hecho daño no sólo sanará las relaciones. También te dará tranquilidad.
- Devolver . Hacer caridad no debería limitarse sólo a Navidad y Acción de Gracias. La retribución debe realizarse durante todo el año. Esfuércese por ser una bendición para los demás todos los días. Puedes empezar como voluntario en un comedor de beneficencia o donando tu ropa vieja a los pobres. (Relacionado: 50 actos de bondad que puedes hacer hoy )
- Conversa con Dios diariamente. Encuentra unos minutos cada día para pasar a solas con Dios. Cuéntale las cosas por las que estás agradecido este día, así como las cosas que te preocupan. Habla con él como lo harías con un amigo.
- Lea libros alentadores. Aparte de la Biblia, los libros inspiradores son una excelente manera de alcanzar la realización espiritual.